martes, octubre 23, 2012

HIGADO GRASO

Muchas personas han preguntado que alimentos son adecuados para tratar el hígado graso y para ayudarlos un poco a elegir sus alimentos, acá les dejo que es lo más recomendable para tratar ésta enfermedad por grupos de la pirámide.
En primer lugar, la dieta para tratar el hígado graso debe ser sumamente sana, restrictiva y selectiva en grasas y seleccionando técnicas culinarias como la cocción a la plancha, al horno, al vapor o hervido.
También es muy importante destacar que el valor calórico total de la dieta será menor que el de una persona sana, ya que por lo general las personas con hígado graso presentan sobrepeso y la idea es qué estas disminuyan el exceso de peso de una forma sana y constante.
En cuanto a los macronutrientes, nos encontraremos con que en porcentaje de Hidratos de carbono se encontrará entre 50 – 55%, seleccionando alimentos ricos en fibra y bajos en azúcares simples; el porcentaje de las Proteínas se encontrará en un 15% del valor calórico total y finalmente las Grasas se encontrarán restringidas, siendo su porcentaje el 25% del valor calórico total, realizando una selección de alimentos que contengan ácidos grasos monoinsaturados, poliinsaturados en mayor cantidad y reduciendo al máximo ácidos grasos saturados.
En cuanto a los alimentos que se pueden consumir, estos son:
1. Cereales: Como estas personas están propensas a hacer hiperglicemias y tener resistencia a la insulina, es necesario que consuman alimentos con carbohidratos de absorción lenta como los son los cereales integrales (pan integral, fideos integrales, cereales integrales sin azúcar, harinas integrales) y alimentos con índices glicémicos bajos como el arroz integral. Lo recomendable es consumir 3 a 10 porciones diarias
2. Frutas: las frutas no están contraindicadas para el hígado graso y se deben consumir entre 2 a 4 porciones.
3. Verduras: Es recomendable consumir verduras de hoja verde todos los días y verduras crudas en general en compañía del almuerzo y/o cena. 2 a 5 porciones al día vendría bien.
4. Carnes: Es recomendable consumir carnes magras como pollo, pescado, pavo y cortes de carne roja magra como la posta. En cuanto al huevo, se puede consumir muy bien la clara de huevo en preparaciones como tortillas o espumas. Las legumbres no están contraindicadas. Las porciones diarias de éste grupo alimentario es de 1 a 3 porciones.
5. Lácteos: En éste grupo lo más recomendado son los lácteos 0% materia grasa, ya que la grasa de los lácteos es saturada y es muy perjudicial para el hígado. También debemos preferir productos como yogurt descremados y quesillo, dejando a un lado los quesos maduros y todos los lácteos altos en grasa. Las porciones diarias recomendadas son 2 a 4 porciones.
6. Aceites y grasas: éstas deben estar sumamente restringidas y tenemos que hacer selección de grasas, prefiriendo aceites vegetales como el de oliva o el de pepita de uva. En cuanto a las grasas animales, estas deben estar estrictamente prohibidas. Las porciones recomendadas son entre 1 a 3 porciones diarias.
7. Azúcares: Por ningún motivo debemos consumir azúcares simples (azúcar de mesa, sacarosa), ya que éstas pertenecen a los carbohidratos de absorción rápida que generan los problemas de aumento de LDL sanguíneo e hiperglicemias. Lo más recomendado es usar edulcorantes como sucralosa o nutrasweet.
Alimentos prohibidos: cecinas, azúcares simples, embutidos, carnes grasas, condimentos irritantes, alimentos azucarados, harinas refinadas, grasas animales, frituras, alimentos ricos en colesterol, manteca, mariscos, etc.
Alimentos permitidos: frutas, verduras, carnes magras, aceites vegetales, aceites con omega 3, pescado, harinas y cereales integrales, lácteos descremados, alimentos con bajo índice glicérico, carbohidratos de absorción lenta, etc.
Hay que hacer hincapié en que el consumo de fibra es muy beneficioso para el hígado graso, ya que ésta reduce los niveles de colesterol sanguíneo.


Pomelo
El pomelo posee antioxidantes y sobre todo vitamina C, este cítrico nos ayuda mucho a funcione correctamente los procesos naturales de limpieza de nuestro hígado, también puedes comer ensaladas de frutas después de las comidas o en forma de jugo.

Aceite de oliva
Tienes que usar el aceite de oliva con moderación y en la medida justa, te sirve para dar una buena cantidad de lípidos a tu organismo que los mismos se ocupan de absorber las toxinas.

Cúrcuma
Los condimentos es la especia que mas benefician al hígado, esto no puede faltar en la lista de remedios caseros porque desintoxica el hígado eliminando las sustancias cancerígenas, así que ya sabes si quieres saborizar alguna comida, alguna ensalada o salsa, ya sabes lo que tenes que usar.

Verduras de hoja verde
Este vegetal posee la vitamina que contienen todos los vegetales la clorofila, esta vitamina es muy buena para absorber las toxinas ambientales que están en la sangre de nuestro organismo, nos ayuda a proteger el hígado mas que a la limpieza del mismo, porque neutraliza muchos químicos que se encuentran en nuestro organismo, para incluirlos en tu alimentación puedes hacerlo en guarniciones o hacer jugos dulces.

Nueces
Las nueces tienen una vitamina muy buena llamada arginina la cual nos ayuda a desintoxicar nuestro hígado de una sustancia llamada amoniaco, también tienen ácidos grasos omega-3 que también cumple la función de limpiar el hígado, solamente debes masticarlas bien antes de tragarlas.

Cereales integrales
El arroz integral es un cereal bastante bueno, ya que ayuda a mantener tu peso normal y es un alimento sano, es muy bueno para metabolizar la grasa, ya que descongestiona el hígado de cualquier tipo de afección, intenta agregar este alimento a tu dieta.

Remedios caseros para el hígado graso (esteatosis)

2011
El hígado graso se considera una enfermedad silenciosa, ya que, en la mayoría de las personas que lo sufren no presentan síntomas evidentes. Sin embargo, otras personas pueden sentir una ligera sensación de presión o dolor en la zona superior derecha del abdomen, fatiga crónica o pesadez después de las comidas.

Para diagnosticarlo, se debe realizar un análisis de sangre cuyos resultados confirmen la existencia de un alto índice de transaminasas (unas enzimas presentes en el hígado) y también un aumento de los niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos. Una biopsia hepática y una ecografía de contraste podrían constituir las pruebas definitivas de su presencia.

Remedios naturales para el hígado graso:

Consumir lecitina de soja ya que ayuda a expulsar la bilis a través del hígado al hacerla más fluida y eficaz.

Lavar, pelar y picar dos rábanos negros y colocar en una licuadora. Añadir un vaso de agua. Licuar por unos instantes y luego colar. Tomar este jugo en días alternos (un día sí y otro no).

Verter dos cucharadas de cardo mariano en una taza de agua que esté hirviendo. Tapar y dejar refrescar. Tomar una taza de esta infusión a diario.

Consumir, cada dos días, las hojas tiernas de cardo mariano y sin espinas en una ensalada.

Tomar una cucharada de mixtura de ruibarbo y soda la cual se adquiere en las farmacias botánicas.

Mezclar una cucharadita de diente de león y centaurea en una taza de agua. Hervir por 3 minutos, retirar del fuego y tapar. Tomar, bien caliente, una taza después de las comidas principales.

Consumir alcachofas en las ensaladas, por lo menos, tres veces por semana.

Recomendaciones a tener en cuenta:

Toda persona que sospecha que tiene hígado graso debe acudir a un especialista para que le confirme, mediante pruebas, si efectivamente lo padece. Si se determina que el hígado graso es consecuencia de una dieta incorrecta, es importante cambiar los hábitos alimenticios. En este caso, se recomienda:

Evitar el consumo de azúcar (principalmente provenientes de pasteles, galletas, etc., fabricados industrialmente).

Evitar la ingesta de bebidas alcohólicas.

Reducir el consumo de productos lácteos enteros y preferir, en su lugar, el yogur desnatado y el kéfir.

Evitar el abuso de las grasas de origen animal. Sin embargo, éstas son una rica fuente de proteínas. Una forma de sustituirlas es mediante el consumo de proteínas de origen vegetal (soja, quinoa, entre otros).

No abusar de los hidratos de carbono de absorción rápida (pan y arroces no integrales).

Consumir pescado azul, por lo menos, tres veces a la semana.

Consumir más fibra en la dieta, ya que facilita la eliminación del exceso de grasa y azúcares (cereales integrales).

Usar técnicas de cocción que permitan eliminar el exceso de grasa como cocinar al horno, al vapor, hervidas o a la plancha. Se debe evitar los fritos y los guisos elaborados con ingredientes ricos en grasa saturada como, por ejemplo, el chorizo o la morcilla.

Realizar ejercicio regularmente como caminar durante 30 minutos al día.

Es importante tomar acciones si se sufre de hígado graso, ya que, de lo contrario, se puede desarrollar una fibrosis hepática (un endurecimiento del órgano) y otros desórdenes internos e incluso existe un alto riesgo de padecer de problemas cardiovasculares.

 

Hábitos dietéticos y de alimentación para personas sin vesícula biliar

  • 5 comidas al día y más ligeras: deforma que ayudamos al hígado, intestinos y estómagos a que tengan más tiempo para asimilar y absorber mejor el alimento.
  • Beber suficiente agua: lo recomendable es beber de 1,5 a 2 litros de agua diarios, cuanto más pura y con menos sodio mejor.
  • Alimentación sana y saludable: es conveniente aumentar el consumo de frutas y vegetales, aunque no es aconsejable mezclarlas con otro alimento, dado que al digerirse fermentará y generará alcohol.

Dieta sin vesícula biliar

A los diferentes hábitos dietéticos y de alimentación indicados anteriormente, es aconsejable tener en cuenta las siguientes recomendaciones de cómo debe ser la dieta sin vesícula biliar:
  • Alimentos recomendables: frutas (como la manzana, uvas, melón, papaya, naranja y ciruela), vegetales (los mejores son los vegetales verdes) y verduras semi-cocidas, cereales integrales y arroz integral, legumbres (como las lentejas y las judías, aunque sin abusar de ellas), carnes blancas sólo asadas y aceite de oliva.
  • Bebidas recomendadas: jugos de frutas naturales, leches vegetales (como la leche de soja), tés (como el té verde y el té rojo) e infusiones.
  • Alimentos que debes evitar: productos “light” ya que desequilibran el metabolismo natural de nuestro cuerpo, carnes rojas, alimentos fritos, comida rápida, embutidos, leche de vacas y derivados (como los quesos y yogures), harinas blancas y derivados (como galletas, cereales refinados o pan blanco) y azúcar refinado (azúcar blanco).

Hábitos de salud recomendables para personas sin vesícula

  • Practica ejercicio físico cada día: no solo será beneficioso para tu salud en general, sino que ayudará a que tu intestino se mantenga activo, eliminando activamente todo aquello que tu cuerpo no necesita.
  • Disfruta de una vida más relajada: aléjate del estrés y de la ansiedad y trata de vivir de forma más tranquila. No olvides de la tensión emocional y nerviosa es perjudicial para tu salud en general y particularmente para tu hígado y tu estómago.
  • Practica alguna terapia relajante: técnicas como el yoga o la relajación pueden serte de utilidad para ayudarte a disfrutar de una vida muchísimo más tranquila.
  •  

No hay comentarios:

Publicar un comentario